Hay momentos en la vida en los que hay que decir: Basta. La primera vez cuesta bastante, no se tiene la
costumbre, pero la vida apremia y hay veces que no se puede más.
Tanto si se entiende como si no, es bueno poner límites, aunque esto acarreé
consecuencias… pero qué más da, hay que vivir con ellas y con uno mismo y si
por no decir basta se siente uno oprimido y dirigido pues no queda otra, hay
que hacerlo.
Di Basta y verás que
todo cambia para mejor.
2 comentarios:
Buenisimo ! Y muy cierto..Hay que saber decir que NO cuando es NO. Ciertamente todo cambia. Un calido saludo!
Sí, todo cambia.
Gracias por el comentario y bienvenida a mi blog.
Un abrazo
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